Esta planta ha sido muy útil desde tiempos prehispánicos, ya que, a lo largo de la historia, sus variadas propiedades siempre han brindado grandes beneficios a la salud y a nuestra paladar.
Las plantas medicinales tienen un lugar destacado en la medicina ancestral mexicana y a pesar de los años no pierden vigencia. Entre estas opciones, una de las más reconocidas es la hoja santa, por cierto sus hojas tienen un aroma distintivo y un sabor ligeramente amargo.
También llamada momo, acoyo, tlanepa o tlanepaquelitesanta, está considerada en el top siete de plantas medicinales de México y se encuentra en una lista privilegiada de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de nuestro país.
Pero por qué tiene este reputación, pues porque tiene una composición rica en miristicina, safrol y antioxidantes.
De acuerdo a la página del Gobierno de México, la hoja santa tiene forma de corazón y su aroma es fuerte. Pertenece a la familia de las pimientas negras. Se cultiva y produce en zonas de clima cálido o templado. Originaria de México y de otros países de América (Guatemala, Panamá y Colombia), esta planta ha sido muy útil desde tiempos prehispánicos, ya que, a lo largo de la historia, sus variadas propiedades siempre han brindado grandes beneficios a la salud y a nuestra paladar.
La hoja santa resulta eficaz ante enfermedades digestivas y respiratorias, esto de acuerdo al documento “Tlayeyecolpahtli (Medicina experimentada). Plantas sanadoras en las comunidades de México” publicado por el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) de México.
Por su parte la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural dice que esta planta ayuda a disminuir la fiebre e inflamación de los riñones, calmar dolores de estómago, evitar la indigestión, estreñimiento, diarreas, problemas respiratorios (principalmente asma y bronquitis). Asimismo, contribuye al combate del nerviosismo e insomnio, gracias a los sedantes que contiene.
Por último y de acuerdo a la “Guía de plantas medicinales en el Valle de México”, también publicada por el INPI, dice que para combatir los granos de la piel, se utilizan las hojas de la planta, se hierven y se aplican en la zona afectada. En el caso de inflamación de la vagina o de la matriz, se recomienda remojar las hojas en aguardiente.
Para aprovechar al máximo los beneficios de la hierba santa, es importante saber cómo consumirla adecuadamente.
Una de las formas más populares de consumir hoja santa es preparar una infusión.
Se utiliza en la cocina tradicional en diversas recetas. Sus hojas frescas pueden agregar sabor y aroma a platos como carnes, pescados, aves, salsas, caldos y quesos. Además, cabe destacar que su olor penetrante es usado en la aromatización de tamales, chiles rellenos y mole verde.
Si prefiere una opción más conveniente, los suplementos de hoja santa están disponibles en forma de cápsulas o extractos. Sin embargo, se recomienda consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier suplemento.
Con información de Infobae y el Clarín
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