Terminas la ducha, cierras el agua y abres la cortina. Nada puede derribarte. Excepto, tal vez, una toalla áspera, sin vida y con moho. Hay esperanza, amigos.
Es fácil mantener las toallas en perfecto estado. Todo lo que tienes que hacer es dejar de lavarlas como cualquier otra ropa y estarás en camino de sentirte fresco, limpio y cómodo. Pero ¿qué tan malo es no lavar tus toallas de baño cada semana?
Usar, colgar, repetir
Empezaré con las buenas noticias. No es necesario lavar las toallas después de cada uso. Estarás fuera de peligro cuando tus toallas estén en un gancho. Solo sécate y luego cuélgala de inmediato.
También mantén las toallas fuera del piso, puedes hacer al menos tres usos antes de lavarlas, por lo que solo tendrás que preocuparte del resto de estos consejos una vez a la semana más o menos.
No mezcles cargas de ropa
Lava tus toallas por separado. Dado que las toallas de baño generalmente se mantienen bastante limpias (estás limpio cuando las usas, ¿verdad?), No requieren tanto jabón como la ropa.
Además, el exceso de jabón puede acumularse en las toallas y opacar su suavidad. El suavizante de telas líquido es definitivamente un no-no, ya que cubre las fibras de las toallas y puede evitar que absorban la humedad.
Cuenta con elementos de cocina
Es fácil refrescar las toallas. Comienza con un ciclo de agua caliente (para ropa blanca) o un ciclo tibio (colores) y agrega aproximadamente la mitad del detergente que usarías para la ropa.
Para limpiar toallas mohosas o quitar el suavizante de telas viejo, agrega de 1/2 a 1 taza de vinagre blanco (¡es un limpiador milagroso!) a tu ciclo de enjuague. No te preocupes, no saldrán oliendo a vinagre.
Usar vinagre cada dos lavados más o menos también puede ayudar a prevenir el olor a humedad, pero también puedes tratar las toallas extra apestosas usando bicarbonato de sodio.
Las toallas muy ásperas pueden beneficiarse de este tratamiento ocasional: un ciclo caliente con solo vinagre (sin detergente) seguido de un ciclo caliente con solo bicarbonato de sodio.
Psst: es una buena idea tener suficiente vinagre y bicarbonato de sodio a mano para todo tipo de manchas de comida. El bicarbonato es muy bueno para varias cosas, pero por favor nunca limpies estas cosas con este polvo mágico.
Secarlos bien
En un mundo ideal, todos lavamos una sola carga de ropa a la vez. Si tu secadora está vacía, es más probable que coloques esas toallas allí de inmediato. Esto ayuda a prevenir la humedad que se puede generar mientras las toallas mojadas se asientan en el lavado.
Las hojas para secadora pueden impartir la misma acumulación que bloquea la absorción que el suavizante de telas líquido. Puedes usarlas de vez en cuando, pero no son cruciales para mantener suaves las toallas.
¿Que es? Agita las toallas mojadas antes de secarlas y sácalas tan pronto como estén secas. Agitar ayuda a esponjar las fibras para una máxima absorción y un secado más eficiente.
Secar en exceso (junto con usar demasiado jabón) es uno de los pecados capitales de la picazón. Si las toallas aún están un poco húmedas cuando la secadora termina, sé más precavido y cuélgalas para terminar.
Pruebe estos consejos con tus toallas; luego, una vez que hayas dominado el arte del mantenimiento, podrás sentirte un poco mejor cantando en la ducha.
Tomado de tasteofhome.com How to Keep Your Towels Fluffy and Fresh
