Entendiendo el dolor lumbar
El dolor de espalda puede hacer más que alejarte de las actividades y las personas que amas, también puede privarte de tu calidad de vida y tu capacidad para descansar bien por la noche.
Y no estás solo. Hasta el 80 por ciento de las personas experimentarán dolor de espalda durante el transcurso de sus vidas.
El dolor de espalda es la razón más común por la que faltan al trabajo y la tercera razón más frecuente por la que las personas visitan el consultorio del médico, según la Asociación Americana de Quiropráctica. (Aquí hay razones más sorprendentes para el dolor de espalda).
Tu espalda está formada por huesos (vértebras), músculos, ligamentos de las articulaciones, nervios y discos intervertebrales, todos los cuales pueden provocar dolor de espalda si se dañan o se desalinean.
Esto puede ocurrir debido a la edad avanzada, trauma, esfuerzo excesivo o enfermedad subyacente, entre otras causas. El dolor de espalda es común en ambos sexos, pero existen algunas causas que son exclusivas de las mujeres. (Signos de que ese dolor de espalda es una emergencia).
Cómo deshacerse del dolor lumbar
“Muchas veces, el dolor lumbar puede ser autolimitado y generalmente no es motivo de preocupación”, dice Jake Magel, fisioterapeuta y profesor asistente de investigación de la Universidad de Utah en Salt Lake City.
“La mayoría de las veces, este dolor se resuelve en seis semanas, pero hay muchas cosas que se puedes intentar para ayudarte a obtener alivio antes”.
Los tratamientos para el dolor lumbar varían desde medicamentos para el dolor de venta libre (OTC) hasta fisioterapia. Otras veces, el dolor lumbar puede justificar una cirugía.
Siempre desea consultar con un médico para asegurarse de seguir el mejor curso de acción para tu afección. Esto es lo que necesita saber sobre las diversas formas de tratar el dolor lumbar.
AINE o analgésicos de venta libre
Los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) como el naproxeno y el ibuprofeno pueden ayudar a enfriar la inflamación y reducir el dolor de espalda.
También se encuentran disponibles AINE de prescripción médica y geles o ungüentos tópicos. Otras opciones para aliviar el dolor incluyen acetaminofén y aspirina.
Recomendado para: la mayoría de los tipos de dolor de espalda (incluidos distensiones y esguinces), osteoartritis, lesión de disco y estenosis espinal, una afección que ocurre cuando el espacio alrededor de la médula espinal se estrecha y ejerce presión sobre la médula y los nervios espinales.
Riesgos: los AINE pueden ser duros para el estómago, advierte la Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos. Sigue siempre las instrucciones de dosificación en la etiqueta para minimizar los efectos secundarios y pregúntale a un médico sobre la adición de medicamentos para el reflujo ácido.
Relajantes musculares
Los relajantes musculares recetados también pueden aliviar algunos tipos de dolor lumbar. A menudo se toman con analgésicos de venta libre para relajar los músculos tensos y reducir el dolor, según la Agencia para la Investigación y la Calidad de la Atención Médica.
Recomendado para: dolor lumbar que no responde al tratamiento de venta libre.
Riesgos: los relajantes musculares pueden provocarte somnolencia y mareos.
Terapia física
Los fisioterapeutas como Magel tienen muchas herramientas y trucos bajo la manga. “Desarrollamos un plan de tratamiento para que coincida con los signos y síntomas de tu dolor de espalda, y esto puede incluir manipulación espinal, ejercicio y educación sobre el dolor”, dice.
El tratamiento se centra en ejercicios de estiramiento específicos que te ayudarán a desarrollar los músculos que sostienen la columna y mejorar la flexibilidad y el rango de movimiento.
Yoga, tai chi y pilates implican estiramientos suaves y también pueden mantenerte ágil, dice Jordan D. Metzl, MD, médico de medicina deportiva en el Hospital for Special Surgery en la ciudad de Nueva York y autor de varios libros, incluido el del Dr. Jordan Metzl’s Running Strong: The Sports Doctor’s Complete Guide to Staying Healthy and Injury-Free for Life.
Algunos fisioterapeutas ofrecen manipulación, un tratamiento práctico que aplica movimientos de empuje cortos y rápidos a una articulación mientras el cuerpo está en una posición específica.
Recomendado para: la mayoría de los tipos de dolor de espalda.
Riesgos: si trabajas con un fisioterapeuta calificado y sigues las instrucciones, la fisioterapia tiene un riesgo extremadamente bajo.
Calor y frío
La aplicación de calor y frío en la zona lumbar puede mejorar el dolor.
Recomendado para: la mayoría de los tipos de dolor de espalda. En general, usa hielo durante las primeras 48 a 72 horas, luego usa calor.
Riesgos: Las altas temperaturas pueden provocar quemaduras. Ten cuidado.
Mejores zapatos
El dolor lumbar puede ser inducido por un calzado inadecuado. Por ejemplo, usar tacones altos puede afectar tu alineación y alterar tu centro de gravedad.
Cuando usas tacones, tiendes a ejercer más presión sobre tus pies, lo que no te permite extender la pantorrilla. Esto ejerce presión y tensión en la zona lumbar.
En el extremo opuesto, el uso frecuente de chanclas sin el soporte adecuado para el arco puede provocar dolor en el arco y desencadenar dolor en todo el cuerpo, incluida la zona lumbar.
Recomendado para: todo el mundo
Riesgos: Ninguno
Tu primer paso hacia el alivio del dolor de espalda es consultar a un médico para averiguar qué está causando tu dolor. Es probable que un médico realice un examen físico y ordene pruebas de imagen para determinar la causa.
Esto ayudará a adaptar mejor el tratamiento a tu dolor de espalda específico. Si tu dolor no mejora con analgésicos de venta libre, fisioterapia u otras medidas dentro de las seis semanas, es posible que debas considerar medidas más agresivas.
Tomado de thehealthy.com 16 Ways to Get Rid of Lower Back Pain for Good
