La mayoría de las personas, sobre todo las mujeres, la padecen, y en los últimos años la cantidad de afectadas con celulitis se ha incrementado.
Por años se ha asociado la lipodistrofia, mejor conocida como celulitis, con depósitos de grasa entre la dermis y los músculos, pero si esto es cierto ¿por qué no se quita haciendo dieta? ¿Por qué no se elimina al bajar de peso y talla? ¿Por qué de hecho se dice que no se quita del todo? ¿Por qué gente delgada la tiene? es más ¿por qué se presenta en personas deportistas?
Recientes observaciones revelan otra causa: la hinchazón de las células por exceso de agua ¡si, de agua!
Y el rostro más negro de la celulitis no es la desagradable apariencia de piel de naranja, lo más grave radica en que esa misma hinchazón celular está en todos los tejidos de nuestro cuerpo, no solo en la dermis: en las células de la sangre, del hígado y hasta del cerebro ¡como es afuera es adentro! Feo ¿verdad?
El Dr. David Duarte, médico cirujano y homeópata por el IPN y pionero en México de la medicina UNANI explica: “la mayoría de las personas, sobre todo las mujeres, la padecen, y en los últimos años la cantidad de personas con celulitis ha incrementado de 84% a 98%.
Nuestra ingesta de agua ha cambiado; nuestro cuerpo está hecho para funcionar con aguas de manantial, de pozos, de ríos, aguas que contienen minerales (mínimo 60) y electrolitos, y por ello un PH alcalino.
Al agua industrializada, embotellada, se le han eliminado la mayoría de estos minerales y electrolitos para evitar que se eche a perder, solo contiende una baja cantidad de sodio y potasio, es un agua ´muerta´ con un PH ácido (hay que recordar que el agua estancada se pudre porque el PH alcalino es compatible con la vida y por ello en ella se pueden generar microbios pero eso es natural, en cambio, el PH ácido no es compatible con la vida).
Resulta que cuando el cuerpo tiene necesidad de mover o desechar agua, lo hace eliminando sales y minerales a través de la membrana de las células y el agua los sigue; cuando no hay sales en el agua, ésta simplemente no puede ser eliminada.
Ciertamente, cuando bebemos mucha agua, orinamos mucho pero la cantidad de orina es menor a la del agua consumida. Esto provoca un edema general, es decir, una hinchazón causada por la acumulación de líquido en los tejidos de todo el cuerpo, por ello es cada vez más común escuchar personas quejarse de sentirse inflamadas o pesadas aunque sean delgadas.
Como consecuencia del consumo excesivo derivado de la moda de tomar mucha agua aunque nuestro cuerpo no nos la pida -agrega el Dr. Duarte- perdemos minerales y electrolitos que son básicos para la vida, lo que provoca pérdida de bioconductividad y edema celular lo que genera un mal funcionamiento de todo nuestro organismo ¿los síntomas? boca y piel seca, sed constante sin importar cuánta agua bebamos, uñas quebradizas, problemas hormonales, baja del sistema inmune por lo que somos más vulnerables a infecciones y contagios de hongos, dolor articular, cansancio, ansiedad, disminución de la memoria y por supuesto, como ya lo dijimos, celulitis.
intenta esto, por tres meses deja de consumir agua sola, sobre todo agua embotellada, y en su lugar toma sueros ya sea comercial (suero, no bebidas energetizantes) o suero casero (se prepara agregando al agua, limón, miel, bicarbonato y sal de mar, todo al gusto).
Los sueros orales isotónicos son una emulación del suero de nuestra sangre, por lo que contienen los minerales, sales y oligoelementos que necesitamos.
Quizá los primeros días te sientas un poco raro, quizá hasta te inflames, pero poco a poco verás como bajas de talla al dejar de estar siempre hinchada y como disminuye la celulitis, es más, quizá te sientas tan bien que decidas adoptar esta medida de manera permanente pero…. por lo pronto hazlo tres meses.
