Tal vez se te haga rara la pregunta, pero de verdad puede pasar.
Muchos teléfonos celulares contienen níquel, metal que puede provocar dermatitis alérgica —un sarpullido con comezón— en un lado de la cara y en la oreja, en un 10 a un 20 por ciento de la población.
“Las mujeres son más propensas a desarrollar la alergia, probablemente porque se volvieron sensibles al perforarse los lóbulos, lo cual puede introducir níquel al torrente sanguíneo”, dice Luz Fonacier, jefa de la sección de alergias de la división de alergias e inmunología del Hospital de la Universidad Winthrop, en Nueva York.
Fonacier analizó los modelos más populares de teléfonos celulares y descubrió que la mayoría de los que tienen tapa y aproximadamente un tercio de los aparatos BlackBerry a los que se hicieron pruebas contenían níquel. El iPhone y los modelos Android que se probaron no contenían níquel.
Si sospechas ser alérgico a tu teléfono, protege tu piel usando el altavoz o colocando una cubierta y una película transparente en la pantalla.
