Aunque algunos pueden pensar que el fumar sólo unos pocos cigarrillos no es un peligro, un nuevo análisis de datos de casi 24 estudios sugiere que incluso un consumo ocasional de tabaco puede tener graves consecuencias para el corazón y la salud a largo plazo.
El estudio de los datos de investigaciones a largo plazo reveló que incluso los fumadores ocasionales tienen este riesgo considerablemente mayor de padecer enfermedades cardiacas y fallecer, en comparación con personas que nunca han fumado, incluso años después de haber dejado de fumar; es lo que señalan los expertos de Johns Hopkins, Estados Unidos.
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Hay que señalar que, si bien investigaciones previas han demostrado que el fumar cigarros aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, la relación exacta entre la cantidad de cigarrillos que se fuman y estos riesgos aún no está clara, especialmente en fumadores ocasionales.
Michael Blaha, del Centro Ciccarone para la Prevención de Enfermedades Cardiovasculares de Johns Hopkins y sus colaboradores han publicado sus nuevos hallazgos en PLOS Medicine. Ellos analizaron datos de más de 300 mil adultos inscritos en 22 estudios longitudinales (que consisten en el seguimiento de grupos de individuos a lo largo del tiempo) durante un máximo de 19.9 años.
En ese periodo documentaron más de 125 mil muertes y 54 mil eventos cardiovasculares e insuficiencia cardiaca. El análisis mostró que incluso el tabaquismo de muy baja intensidad (que se define como el consumo de dos a cinco cigarrillos al día) se asoció con un riesgo un 50% mayor de insuficiencia cardiaca y un riesgo 60% mayor de muerte por cualquier causa, en comparación con quienes nunca han fumado.
Otra cuestión interesante es que el riesgo de eventos cardiovasculares disminuyó considerablemente durante la primera década luego de dejar de fumar y continuó reduciéndose con el tiempo, pero incluso hasta tres décadas después los exfumadores aún pueden presentar un riesgo mayor en comparación con quienes nunca han fumado.
Lo mejor es no fumar
Esto dado que incluso fumar ocasionalmente o en cantidades muy bajas aumenta significativamente el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y fallecimientos; concluyendo los investigadores que dejar de fumar a edades tempranas es la mejor manera de disminuir dicho riesgo, en lugar de reducir el número de cigarrillos fumados a diario.
El hallazgo refuerza las directrices de salud pública que recomiendan a los fumadores dejar el mal hábito en lugar de simplemente reducir el consumo.
Los autores señalan que es notable lo perjudicial que es fumar, ya que incluso en bajas dosis conlleva grandes riesgos cardiovasculares, por lo que es mejor dejar de fumar a reducir la cantidad de cigarrillos que se consumen.
