Pasas la mayor parte del día en el trabajo. Para cuidar tu dentadura, adopta estos hábitos y ten a la mano los artículos de limpieza necesarios.
La higiene bucal es importante todo el día, no sólo a primera hora de la mañana y antes de dormir. Es conveniente que prestes atención a tus dientes y encías mientras estás en la oficina. Tal vez no te parezca fácil encargarte de tu higiene bucal en el trabajo, particularmente cuando estás ocupado con múltiples tareas o cuando las jornadas se alargan. Sin embargo, hay maneras prácticas de cuidar tu dentadura mientras trabajas. Para adoptar buenos hábitos de higiene bucal en la oficina, sigue estos sencillos consejos:
Ten en cuenta tu sonrisa
Piensa en el número de colegas, supervisores y clientes con quienes te encuentras cara a cara a lo largo de un día normal en la oficina. ¡Eso debería ser una motivación más que suficiente para cuidar tu boca en el trabajo! ¿No te gustaría que tu sonrisa fuera la más radiante y tu aliento el más fresco? Quizá nunca se te ha caído un trato con un cliente por tener aliento a cebolla o un trocito de lechuga entre los dientes, pero lo cierto es que esos descuidos afectan tu imagen.
Vence el temor
¿Te produce vergüenza o incomodidad cepillarte los dientes en el lavabo de la oficina? Vence ese temor. “Creo que no tiene nada de malo entrar a un baño público a cepillarse los dientes”, señala Jacki Blatz, higienista dental y propietaria del Centro de Higiene Dental Dentique, en Fort Saskatchewan, Canadá. “La higiene bucal es parte de nuestra rutina diaria, así como hacer ejercicio físico puede serlo también”.
Ten a la mano lo necesario
Guarda un cepillo de dientes, un tubo de dentífrico y un dispensador de hilo dental en el cajón de tu escritorio, no en tu bolso o en tu portafolios. Una encuesta realizada en Canadá reveló que los empleados tienen 65 por ciento más probabilidades de cepillarse los dientes en la oficina si utilizan esta estrategia, en vez de llevar consigo los artículos de limpieza.
Come bien para mantener una salud bucal óptima
Evita consumir bocadillos azucarados en el trabajo. Cuando sientas ganas de comer algo, las frutas y las verduras son mejores opciones, ya que frotan y limpian tus dientes mientras las masticas. El queso es también una excelente opción para rematar el almuerzo o para satisfacer un antojo a media mañana, pues aumenta la secreción de saliva y ayuda a eliminar el azúcar de la boca.
Recuerda que el agua es una maravilla
Mantente hidratado tomando agua natural, no bebidas azucaradas ni jugos de frutas. Y si no puedes cepillarte los dientes inmediatamente después de almorzar o tomar una colación, enjuágate la boca con agua. “Hacer enjuagues vigorosos con agua elimina tantas bacterias como usar un enjuague comercial”, asegura Blatz.
