Cuando hablamos de la dentición y la imposibilidad de los dientes para volver a crecer, siempre surge la gran duda de por qué nuestro organismo aún no ha evolucionado lo suficiente como para que nuestros dientes puedan curarse a sí mismos como el resto de nuestro cuerpo, ¿verdad? Pues lo cierto es que todo se debe a las células. Sin células, nuestro organismo no tendría la capacidad de sanar.
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En el caso de nuestros dientes, más del 90% de sus componentes son minerales como calcio, magnesio o fósforo. Habiendo muy pocas proteínas y células allí, estos carecen de la cantidad de células necesarias como para poder sanar por sí solos. Las pocas células que hay en los dientes, además, están en la raíz y no en la zona de la corona, por lo cual las caries dentarias que producen las bacterias en esa zona son los peores enemigos que un diente puede tener.
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Por todo esto es muy, pero muy importante cuidar los dientes, ya que lamentablemente no tenemos la dentadura que tienen algunos animales, como el cocodrilo o tiburón que pueden regenerarse.
